miércoles, 5 de agosto de 2009

Espiral

No sé pedir,
y el cielo se nubla de dudas ciertas
El presente pide y pide
y ruin es creerle el alma
porque a veces mira lo que no se ve.
Pedimos lo que nos falta.
Pedimos no estar solos.
Vos, yo, nosotros…
no sabemos pedir.
Pedirse a sí mismo es pedir.
Mientras las horas son espirales eternos,
me hago un pedido.
Seré felíz hasta cuando no estés.
Y el tiempo fluirá olas entre ceños
hasta que creas que volverías.
No sé cómo, ni cuando, ni dónde.
Sólo ahora sé
Que eso no hace falta.
pues te quedaste en mí
siendo destino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario